Descubre la magia de Chicago en 4 días: una sinfonía de arquitectura imponente, la mejor Pizza 🍕 de Estados Unidos y cultura vibrante te esperan. Desde el icónico Millennium Park hasta la majestuosidad del 360 Chicago Observation Deck, cada rincón te cuenta una historia, ¡Chicago te invita a vivir una experiencia inolvidable! Explora y sumérgete en la autenticidad de "La Ciudad de los Vientos".
ALOJAMIENTO: Warwick Allerton Chicago
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PRECIO APROXIMADO: 185€ / noche
PRECIOS DE OTROS HOTELES EN CHICAGO (IL)
Después de ser el único vuelo retrasado ¡Conseguimos llegar a Chicago! Llegamos sobre las 19:00h y es el la ciudad por la que empezaremos nuestra particular Ruta 66 por EEUU.
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Desde el aeropuerto de Chicago-O'Hare (ORD) hay diferentes opciones de transporte para llegar hasta la ciudad. En concreto lo podemos hacer de 4 maneras:
¿Adivináis donde cenamos esa misma noche?
Nada más dejar las maletas en el hotel, lo primero que hicimos fue ir a cenar a Giordano's. La fama que nos comentó el conductor se la tienen bien merecida. Son una pizzas completamente fuera de lo normal y buenísimas, eso sí, id un día que tengáis hambre, porque llenan una barbaridad. Nosotros lo consideramos una parada obligatoria en tu visita a Chicago.
TIP VIAJAMOS2: A no ser que tengáis un estómago a prueba de balas... recomendamos que pidáis una Pizza para compartir, ya que son muy contundentes.
Después de esta cena contundente, decidimos ir a descansar al hotel para empezar el viaje a Chicago con fuerzas.
Al día siguiente, aún con Jet Lag, nos despertamos muy temprano, nos pegamos una ducha y ¡a empezar el día!
Después de nuestro desayuno en Starbucks, empezamos la mañana de camino hacia el sur por la “Magnificent Mile de Chicago”, una avenida llena de tiendas (muy peligrosa para compradores fáciles con una billetera amplia), ya que tienes tiendas como Michael Kors, Gucci, Omega, Victoria's Secret, Tiffany & Co, Cartier, Rolex, Hugo Boss, Burberry todas en la misma avenida y luego, un par de tiendas para el resto de los mortales como H&M o Zara.
Llegamos hasta el final de la “Magnificent Mile”, que si no paras en ninguna de sus tiendas tardas aproximadamente 8 minutos en llegar al puente “DuSable Bridge”, uno de los puentes más bonitos de Chicago. Es un buen sitio para hacerse fotos y disfrutar de las vistas al río.
Caminando 10 minutos más, llegamos a “Millenium Park”, donde encontramos la famosa “The Bean o Haba de Chicago” y con mucha suerte y si las hordas de turistas te dejan... puedes hacerte unas fotos chulísimas. Eso si, hay que tener más paciencia que el santo Job.
ACTUALIZACION 2024: Varios viajeros nos han informado que la famosa haba del Millenium Park se encuentra en obras, pero que no cunda el pánico, en teoría a lo largo de este mismo año estará disponible The Bean.
TIP VIAJAMOS2: Nuestro consejo para hacerte fotos sin nadie es madrugar mucho y acudir a esta plaza alrededor de las 6AM, pero esta solo es apta para los que no se les pegan las sábanas...
Si seguimos andando hacia el sur (a nosotros nos tocó ir por fuera del parque ya que estaba cerrado por un evento), llegamos a la Fuente Crown, que son dos torres de 15 metros, iluminadas por leds con caras en movimiento, donde el chorro de agua lo tiran por la boca. Un bonito y peculiar espectáculo obra del Español Jaume Plensa.
Siguiendo nuestra ruta de camino a la fuente de Buckingham, nos encontramos con una panorámica de la ciudad espectacular, en la 185 E Jackson Dr, justo arriba de la “Van Buren Metra Station” hay que cruzar el puente que hay encima de las vías del tren, nosotros lo vimos por casualidad, pero merece la pena ver el Skyline de la ciudad desde aquí. Si continuamos por la misma calle dirección Este, llegaremos a una gran zona ajardinada, desde la que podremos ver una de las fuentes más grandes y con el cañón de agua más alto del mundo, la “Buckingham Fountain”, en funcionamiento desde 1927 y de estilo rococó.
Si hubiésemos decidido ir más hacia el sur, podríamos haber visitado el Museo Field de Historia Natural o el Acuario, pero no somos muy de encerrarnos en museos, a no ser que nos interese mucho la temática y los acuarios... consideramos que hay mejores cosas que ver en una ciudad como Chicago. Nos recomendaron no bajar más allá de esta zona, ya que eran barrios más conflictivos y no tan amables con los turistas...
Decidimos tomar rumbo hacia el norte por el "Lakefront Park", bordeando el paseo que hay a orillas del Lago Michigan , disfrutando de parques y zonas verdes preciosas, que la gente local utiliza para hacer yoga, caminar o hacer prácticamente cualquier deporte al aire libre que podamos imaginar. Aunque no son los únicos que utilizan este espacio... Te puedes encontrar con muchísimos gansos preciosos y con sus amables “cacas” en medio del paseo, así que disfrutad de las vistas pero... ¡cuidado no piséis una!
Si continuamos andando por la bahía del Lago Michigan, llegaremos hasta el Navy Pier, un muelle que está lleno de restaurantes tipo Food Court y tiendas (os explicaremos en otro post lo que son los Food Court). Para comer nos decidimos por algo típico de USA, unos Hot Dogs ¡que estaban buenísimos!
Arriba de los restaurantes, al aire libre, hay un mini parque de atracciones para los más pequeños y una gran noria, donde os pueden salir unas fotos muy bonitas. Os lo recomendamos.
Nos resulta muy extraño explicar las cosas con los puntos cardinales, pero en Estados Unidos la gente lo explica así. Es muy útil a la hora de consultar el mapa, ya que te orienta fácilmente hacia donde dirigirte, aunque en España seríamos incapaces de explicarlo así.
Después de comer y haber visto todo el parque de atracciones, decidimos hacer camino hacia el hotel.
TIP VIAJAMOS2: Para ahorrar dinero en vuestro viaje podéis hacer paradas en los supermercados que hayan de camino a vuestro Hotel y comprar comida preparada y agua.
En nuestro caso, paramos en Whole Foods, donde hay mucha variedad de comida hecha para llevártela, decidimos llevarnos un Poke y un par de paquetes de Pringles a la habitación. Aprovechamos para comprar botellas de agua que estaban en oferta (24 botellas de 500ml por 4$, que es lo que de normal cuesta una por la calle), y así tuvimos para varios días del viaje.
Nuestro primer día en Chicago terminó aquí, ya que habíamos hecho todo el recorrido andando y estabamos agotados.
Para no perder la costumbre... Nos levantamos muy pronto, desayunamos en Starbucks y de ahí nos fuimos directos al mirador 360 Chicago, antes de que Inma se arrepintiera, ya que con el miedo que le dan las alturas, se había levantado muy motivada, así que sin perder un segundo allí que fuimos. El precio de la entrada General es desde 30$, se pueden comprar a través de Internet o en la taquilla del rascacielos.
El ascensor iba rapidísimo y se notaba un vacío en el estómago, pero merece la pena... ¡Menudas vistas! Tal como indica el nombre del edificio, tienes una vista de 360º de Chicago.
TIP VIAJAMOS2:Si eres amante de las experiencias algo más fuertes y no tienes vértigo... El 360 Chicago tiene un apartado que es el TILT, donde hay cristaleras en las que te apoyas y se inclinan hacia el vacío con un sistema hidráulico desde el piso 94. Su precio es de 8$ y sólo lo hizo Alex, que es el atrevido. Aquí abajo te dejamos un vídeo.
Y con esas vistas se nos hizo la hora de comer. Justo en la entrada del edificio hay un par par locales y nosotros decidimos probar Dos Toros, una Taquería mexicana que resultó estar bastante buena, a un precio de Fast Food. Según nos han dicho varios seguidores, han cambiado el local de ubicación quedando lejos de este punto.
A escasos 2 minutos andando encontrarás la “Fourth Presbyterian Church”, una pequeña iglesia presbiteriana con mucho encanto y que parece enana, ya que está rodeada de rascacielos. Merece la pena entrar, aunque sea solo para ver su interior, a nosotros nos transmitió muchísima paz.
Después de nuestro momento espiritual, volvimos a andar hacia el sur, en busca de la famosa placa donde empieza la Ruta 66 en Chicago. El día anterior pasamos por delante y no nos dimos ni cuenta (queda muy cerca del Van Buren Metra Station que os comentamos del día anterior).
Fue un poco decepcionante, es mucho más pequeña de lo que nos imaginábamos, y no sabemos cuál es la gracia de ponerle pegatinas a todas las señales... Puedes encontrar en esa misma calle (78-98 E Adams St) dos carteles más que indican el inicio de la Route 66.
TIP VIAJAMOS2: En la 135 N Wabash Ave encontrarás un lugar perfecto para hacer fotografías del metro elevado, con un ángulo muy bueno y la Torre Trump de fondo.
El metro elevado es uno de los puntos que no te puedes perder de Chicago. Es muy peculiar verlo, y casi sin darnos cuenta se nos hizo de noche, un momento perfecto para ver el cartel del Teatro de Chicago iluminado. Tuvimos algo de “mala suerte”, porque esa noche actuaba Avril Lavigne, estaba Sold Out y había mucha gente. Aún así, sigue siendo un lugar magnífico para fotografiar y parada imprescindible en la ciudad del viento.
Nos recomendaron cenar en Portillo’s (100 W Ontario St) y probar sus famosos Hot Dogs, por lo que nos acercamos caminando hasta allí. A nosotros no nos parecieron los mejores de la ciudad, tal y como nos habían dicho, el día del Navy Pier nos gustaron más que esos. Además, si buscas un lugar algo tranquilo... este no es tu sitio. Hay mucho bullicio de gente y algo de “descontrol” en cocina.
Después de esto fuimos cogimos un Lyft y nos fuimos al hotel. Ya en nuestro hotel nos pegamos un susto de muerte, nos llegó una notificación al móvil (que habíamos comprado una SIM de Estados Unidos) que iba a haber “Heavy Rain and Flash Flooding” o lo que es lo mismo “Fuertes lluvias e inundaciones repentinas” al día siguiente...
ALERTA SPOILER: Nosotros estuvimos 4 días, pero entre la llegada que se nos retrasó más de la cuenta y que este último día no fue del todo provechoso, consideramos que con 3 días podréis ver cómodamente Chicago... ¡si no os sale el mismo tiempo que a nosotros!
La notificación de nuestro móvil estadounidense llevaba toda la razón...En nuestro último día en Chicago nos salió un tiempo horrible, pero no podíamos quedarnos en el hotel, eso en un viaje es… ¡Imposible!
Nos abrigamos y a la calle. Este día teníamos pensado subir a la Willis Tower para disfrutar de su maravilloso mirador, pero estaba tan cubierta de nubes que no pudimos subir, porque pagar para no ver nada... como que no.
Decidimos cambiar el plan radicalmente, así que fuimos de centros comerciales y comprando alguna cosita que necesitábamos para el viaje. Como nos quedamos cerca de la zona del hotel por si acaso se complicaba lo de las inundaciones, fuimos a comer a Giordano’s, que a mediodía tiene menú, después de la pizza de la otra noche pensábamos que el menú iba a ser menos, pero que equivocados estábamos, volvimos a salir rodando.
TIP VIAJAMOS2: Para ahorrar dinero pedir siempre “Tap Water” que es agua del grifo, está bastante buena y lleva un ingrediente secreto que a todos nos gusta llamado... ¡GRATIS!.
Por la tarde seguimos de tiendas, ya que el tiempo no acompañaba y disfrutamos de un día con tormenta en Chicago, con sus rayos y centellas incluidos. La foto, aunque no lo parezca fue tomada de noche, pero por un momento se hizo de día...
La noche en el hotel siguió la misma dinámica, lluvia, truenos y rayos sin parar, aunque a la mañana siguiente parecía que no había caído ni gota... ¡hasta que empezamos la Ruta 66!
No dejes de leer nuestro siguiente post de la Ruta 66 y averigua qué nos pasó...
Encontrar vuelos directos a Chicago puede ser complicado dependiendo de qué ciudad seas, por lo que te recomendamos ver qué itinerario de vuelo puedes elegir para llegar hasta la ciudad del viento desde el banner que tienes más abajo.
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